
Entrevista:
Revista Suyai TV
Una conversación con un artista o figura cultural donde buscamos profundizar en aspectos de su obra, vida y/o proceso creativo.

Entrevista:
Revista Suyai TV
Una conversación con un artista o figura cultural donde buscamos profundizar en aspectos de su obra, vida y/o proceso creativo.
Entrevista al artista Alex Chellew en Revista Suyai TV
Una entrevista de: Suyai TV. 06/10/2025
Alex Chellew es un artista visual chileno cuya obra se caracteriza por una constante exploración entre lo matérico, lo simbólico y lo espiritual. Formado en Francia y con una trayectoria que abarca más de tres décadas, su trabajo transita entre la pintura, la instalación y la experimentación sonora. A través de una estética que conjuga color, gesto y textura, Chellew propone un diálogo entre la naturaleza, el cuerpo y la memoria colectiva.
Además de su trabajo plástico, ha incursionado en proyectos colaborativos vinculados al arte sonoro —como el disco experimental creado junto a otros artistas—, reafirmando su interés por expandir los límites de la experiencia artística hacia lo sensorial y lo transdisciplinar.

Danseuse 1992
Has trabajado durante décadas, con estudios en Francia, una intensa producción pictórica y presencia institucional (como Presidente de APECH). ¿Cómo ha evolucionado tu relación con el color, la memoria y los motivos personales (fotografías familiares, collages, objetos) desde tus primeros trabajos hasta hoy? ¿Qué elementos de entonces sientes que siguen vivos en tu práctica actual?
Partiendo desde la base Francia: Mi Aprendizaje en Francia fue profundo tanto artístico como en general, ese país me entrego mucha instrucción, ame mi vida universitaria, todo lo que se me enseñó era una verdadera esponja. Fue en la ciudad de París donde comencé a exponer mis primeras obras, llegando a realizar una decena de exposiciones personales hasta fines de 1997 y participar en 34 exposiciones colectivas, después he vuelto varias veces a exponer en Francia.
Al comienzo trabaje más bien una variable que se la puede denominar una estética cosmopolita como un punto de partida es el reconocimiento de la cultura afroamericana e indoamericana, y las otras culturas llegadas a nuestra América, a Chile, es en esta variable en donde me situé, en esta identidad y quienes adherimos a esta variable, no buscamos un imaginario acentuado localista como los indigenistas, ni tampoco enfatizamos en su procedencia y pertenencia Latinoamericana. Estamos conscientes del carácter planetario de la práctica del arte y queremos insertarnos en una realidad sin fronteras, optamos por la inserción sincrónica en la modernidad y renunciamos a la explicitación deliberada de signos identificatorios. El arte tiene escasa relación con las fronteras nacionales y la labor es alcanzar dominio en los problemas formales que nos plantea el lenguaje artístico y a la vez, expresar los problemas fundamentales del hombre. Hay que fortalecer los lazos cosmopolitas, al mismo tiempo justificar la actitud afirmando que nos situamos en América Latina en el mapa de la cultura universal.
Para mi un artista debe sentir las emociones, las inquietudes, las necesidades, las penas y alegrías de la gente y de su época, con una ideología llena de vida, de emoción, de humanidad y de verdad, sin tratar de contar una historia completa, sino plantear una idea, una reflexión.
El Arte no debe dar soluciones sino reflexiones
Un artista debe ser capaz de estructurar, componer, dirigir sus sueños, sus sentimientos, sus imágenes, sus tristezas, etc..
Una obra de arte debe saber abrirse hacia una asociación, una curiosidad, una intención, una atracción desinteresada y un «no se qué» tal vez este «aquí ahora”, el movimiento se sitúa entre dos puntos: el equilibrio.
Creo aun transitar en ello
Mis obras son más bien historias vivenciales con conceptos de viajes reales o no con planos de un fondo de nostalgia que a momentos invade, viaje que da cuenta de la espiritualidad del artista.
Se trata de un relato en movimiento, unidos por una sola transversal que no es más que mi propia línea de viaje…
Se asoman entrelazados dibujos y animales quiméricos, que conforman lúdicas escenas pictóricas envueltas en atmósferas románticas, gestuales y esgrafiadas.
De esta manera mi obra se va vinculando paulatinamente como registro de acontecimientos biográficos y de escenarios humanos habitados.
Un imaginario sugerente y evocador.

El sapo vigilante de una noche sensual 1992
Tu obra “Señales de Viaje II”, “Vida y Muerte”, entre otras, parecen conjugar lo biográfico con lo simbólico, mezclando lo íntimo (familia, viajes, recuerdos) con lo estético. ¿Cómo negocias el punto de encuentro entre lo autobiográfico y la universalidad en tus trabajos? ¿Cuánto de la obra trata de tu mundo interior y cuánto lo de un espectador que “entra” con su propia memoria?
Señales de Viaje
A través de la muestra señales de viaje entregue pictóricamente mi experiencia personal un aprendizaje del Arte como viaje interior. Viajero viene en efecto de vía y es de la vía que él tiene su ser de viajero. El viajero es, pues, el que anda, es decir, que se mueve sobre una vía infinita. Si uno le pregunta dónde está, él responde: sobre la vía; si uno le pregunta de dónde viene, él responde: de la vía, y si un le pregunta a dónde va, él responde: hacia la vía. Y así es como una vía infinita es llamada el lugar del viajero… Nicolás de Cusa (citado por: White, 1987, p. 54). Michel Fabre muestra que el viaje presentado por Julio Verne a principios de la modernidad se constituye así a partir de cuatro elementos fundamentales: el desplazamiento, los acontecimientos, el deseo de saber y la búsqueda.
Vida y Muerte
Pensando en la memoria, en el amor en la amistad esa exposición se la dedique a familiares y amigos que a la fecha habían fallecido y que dejaron una huella en mi vida, hablo de esas huellas solidarias y amistosas, de esas llenas de encanto y cariño, de aquellas repletas de enseñanza y de lucha, que instalaron cultura y patrimonio, huellas que también me hicieron sufrir, en ese sentido de igual manera dedique esa muestra a algunos familiares que me dejaron poco y que fueron duros como un hielo en el desierto.
En vida y muerte incluí a mascotas a esos perrines que he querido
Jack el perro sonriente, la Lady y el Tracy, Volga la bella dama, Diderot hijo idiota de Volga y Guach Perry el perro noble y hablador.
Como bien escribió Mario Soro para esa muestra: “Alex Chellew en su obra establece una ruta, digo toda la acepción de este término, desde lo que significa: La recopilación y acopio de los elementos cotidianos, que suman el tránsito del tiempo.
Boletos de micro, de metro, de avión, de barco y de buses. Timbres, vales, boletas, entradas, estampillas, pequeños sobres, imágenes de pasaportes, carnet, fotos familiares, antiguos documentos e imágenes halladas. Elementos que arman dicha consciencia del tiempo en el testimonio del impreso y del objeto.
Uno a uno, uno tras otros, como si la sumatoria de estos fragmentos constituyen virtualmente una línea de tren, en que cada vagón posee la virtud desbocadora de un momento, estableciendo un proceso de montaje de episodios a modo de relatos cinematográficos. Imágenes que retrotraen al hábito infantil del acopio lineal de objetos en una gran cadena generadora de relatos…..
….La figura del recorrido y del viaje, acusan actualmente en la obra madura de Alex Chellew una revisión panorámica de los valores extremos de la existencia. El conflicto Vida- Muerte. Su pintura constituye un acto potente de consciencia por la dimensión valórica y permanente de su quehacer. Así como el testimonio del gesto plástico y humano de su condición de artista. Estos valores, no solamente, han estado presentes en los momentos críticos “de la muerte de la historia”, reciente de Chile en las que el autor con su obra y su testimonio, en el campo de la contingencia. Mediante la entrega y servicio a la comunidad: Convocando, promoviendo, organizando la actividad del arte y la cultura, hacia iniciativas trascendentes en el marco de la cultura y los espacios de vida en Chile. Sino que también en otra dimensión que es la presencia íntima del amor. Como otro “obrar” fundamental de la existencia, el llamado profundo del enlace amoroso, erótico, cómplice y pasional. Lo anterior como un faceta, complementaria a otra de tono (re) conciliador y sanador, protector y regenerador, calmo y ensoñador.”
Pintura con corazón
La pintura de Alex Chellew, siempre tiene corazón, corazón terráqueo, corazón–hogar, la unión familiar, pero también el corazón del arraigo y del desarraigo; corazón prestado, en el corazón de Francia, corazón de lengua y de pertenencia, Gran Corazón, corazón-perro, corazón-lugar y finalmente Corazón País.
En momento actual, en la obra de Ale Chellew, comprenderá una revisión episódica en la cual, el conflicto entre documento y mancha, entre tela y objeto, comprenderá también un diálogo con objetos, todo lo anterior en visiones secuenciales en las que comparecerán los anteriores antecedentes pero en suertes de vitrinas, nichos, cajas, envases, clausuras, clasificaciones en que imágenes, los viejos perros, se enfrentan a pequeñas herramientas, herramientas, instrumentos, ¿armas?, que constituyen galerías, ventanas, ¿trenes?, en las que el signo de dichos elementos se confrontan al gesto, objetos sobre los rostros, frases que recorren estas galerías, textos que son texturas, que son finalmente paisajes dinámicos, enfrentados como un cómic, como un film con una fluidez de relato que innova en su trayectoria para esta exposición”.
Has liderado proyectos institucionales como presidente de APECH y en la supervisión de concursos y obras de arte público, y al mismo tiempo has trabajado en proyectos experimentales como el arte sonoro y digital con Pazific Zunami. ¿Cómo gestionas la tensión entre lo institucional y lo vanguardista, y qué aprendizajes o desafíos encuentras al desarrollar obras que combinan lo visual, lo sonoro y lo digital, considerando también cómo el público las recibe?
Desde hace algunos años estoy liderando la APECH, mi labor como presidente de la Asociación de Pintores y Escultores de Chile, la ejerzo con profesionalismo y mucho cariños, sabemos que tenemos un rol muy importante y con el tiempo y la experiencia he ido desarrollando habilidad para conjugar el arte con políticas públicas y salir ileso de tan compleja tarea, otra función que ejerzo con amor y profesionalismo es mi rol como Director de Concursos de Arte Público y supervisor de Obras de Arte de la Unidad de Arte Público de la Dirección de Arquitectura MOP Unidad Operativa de la Comisión Nemesio Antúnez durante 25 años. Tengo un compromiso robusto para con mis compañeros de ruta los artistas, todo bastante toma tiempo, pero de algún modo ese compromiso con el arte es un pie forzado para obligarme a ser artista primero.
Con respecto a la obra que realizamos con Pazific Zunami (Leo Lobos y Rafael Insunza) en lo que respecta al arte Sonoro yo podría decir que era la guinda de esa torta Leo con la Poesía y Rafa el arte y música nos fuimos complementando y salió el Camino a Copa de Oro
Mi pasaje por el arte sonoro es un paréntesis a pesar que la música siempre me ha rodeado y acompañado.
Finalmente, mirando el presente y el futuro, con los desafíos de la precarización, la institucionalidad, las nuevas tecnologías, la ecología estética, etc., ¿qué proyectos o ámbitos te gustaría explorar más? ¿Qué direcciones te parecen promisorios o necesarios para tu obra en los próximos años, tanto en pintura como en formatos híbridos o colaborativos?
Mi vida y con ello mi trabajo plástico, tiene una gran compañera de ruta que es la artista Antonella Gallegos, de cierta forma estamos atados a la misma estrella. Obviamente cada uno posee trabajos con características propias, el mío espero seguir trabajándolo y madurándolo, las fotografías familiares e históricas seguirán asomándose entrelazadas, escritos, dibujos y animales muchas veces quiméricos, seguirán conformando mis lúdicas escenas pictóricas envueltas en atmósferas gestuales y esgrafiadas. Mi forma de ver el mundo; veces bidimensional y en otras con planos alternos que enfrenta su dibujo como manifestación artística descriptiva o expresiva.
Mi estilo es el resultado de una opción personal en la búsqueda de aquello que algunos denominan el ideal conceptual del artista. Estas formas planas que se entrelazan con los residuos de mis bolsillos y se extienden permitiendo reconocimiento “sujeto de la obra”.
